Uno de tantos experimentos sociales que acaba con las lágrimas de un mendigo y que puede hacerte asomar alguna a tí, si lo ves hasta el final.
Unos jóvenes prueban a pedir algo de comida a la gente que va encontrando por la calle. Encuentran un NO como respuesta en todos. Al final le piden algo de comer a un mendigo. Adivina qué pasa.