Con sólo tres preguntas logra besar a las chicas que encuentra

Que, por cierto, son muy guapas. Si lo miras detenidamente, observarás que no oponen resistencia alguna. El truco, más que el acierto de las 3 preguntas (a las que no hay que quitar su mérito), está en que el tipo no está nada mal, según declaran sus propias «victimas».

Eso sí: con todo lo acertadas que estén las preguntas, y con un argumento aún mejor elaborado, y con todo lo que se te ocurra que se le pueda añadir o quitar para superar el método, te garantizo que si lo hago yo (que no necesito careta para ir disfrazado), salgo apaleado del intento.

Me sorprende lo fácil que le resulta y la nula resistencia que oponen las cantidatas a ser besadas. Claro que a nadie le amarga un dulce, sobre todo si se lo ponen fácil y pràcticamente sin argumentos para rechazarlo.

Disfruta del vídeo. Y practica, si te dejan….

 

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